Declaratorias ocasionarían fuga de obras artísticas
Miguel Angel Ceballos De concederse el amparo a los propietarios del legado de
María Izquierdo, designado patrimonio nacional, se sentaría un precedente legal
Si los principales coleccionistas de la obra de María
Izquierdo logran ampararse sentarían un precedente muy interesante. Sería como
poner un aviso que diría: señores coleccionistas de Rufino Tamayo, pónganse
listos y saquen sus obras del país antes de que se haga la declaratoria, porque
después su negocio se va a ver afectado. Considerando, claro, que Tamayo es uno
de los próximos candidatos para obtenerla".
Esta es la opinión de la historiadora del arte Blanca
Garduño frente al juicio de amparo que han interpuesto los coleccionistas
nacionales de la obra de María Izquierdo (1902-1955), tras ser declarada como
Monumento Artístico el pasado 25 de octubre.
Los coleccionistas, entre los que se encuentran Andrés Blaisten, Mariana Pérez Amor y Alejandra Iturbe, han manifestado su molestia por dicha declaratoria
sin previa información, al grado que retiraron de los museos públicos las obras
que habían prestado en comodato.
Para Blanca Garduño, el problema se circunscribe a
cuestiones monetarias, ya que, asegura, "las declaratorias provocan el
aumento de los precios en el mercado del arte, pero al mismo tiempo perjudican
al coleccionista nacional porque ya no puede vender libremente la obra fuera
del país, en las grandes galerías".
Garduño considera que no son convenientes las declaratorias
como monumento artístico, pues sólo fomentan el mercado negro de obra
artística, ya que de cualquier forma éstas salen, además de que en algunos
casos también las falsifican.
Rafael Cruz Arvea, investigador
del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes
Plásticas (Cenidiap), indica que el problema derivó
de la falta de información, ya que mientras en anteriores ocasiones en que se
hicieron este tipo de declaratorias los poseedores de obra eran informados,
esta vez los coleccionistas fueron tomados por sorpresa.
"Les avisaron de la exposición conmemorativa que se
llevaría a cabo en el Hospicio Cabañas, en Guadalajara, el pasado mes de
diciembre, pero yo creo que lo de la declaratoria se lo sacaron de la manga y
de ahí su molestia. Para nadie es un secreto que toda gran exposición
conmemorativa genera cambios en el mercado del arte, hay algunos coleccionistas
que quieren adquirir obras y en el marco de la exposición hacen esas
negociaciones libremente, pero con la declaratoria los precios suben muchísimo
más, de tal forma que si una obra valía 20 mil dólares, con la exposición
conmemorativa valdrá 40 y con la declaratoria subirá a 60 o 70 mil, es una
cuestión de mercado."
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