Porque el ojo estorba para pintar

                 

Dirigido por las artistas visuales Diana Martín y Ana Cooke, el ex convento del Carmen albergará un taller para invidentes y débiles visuales. La idea es romper con la discriminación que aqueja a estos grupos sociales.                         

Diana Martín asegura que al crear con los ojos vendados resultan “piezas más espontáneas”.

 

            PÚBLICO 12-Septiembre-08

 

 

            Las personas invidentes y con debilidad visual son discriminadas tanto por los creadores como por los funcionarios culturales en Jalisco. Esto lo afirma Jade Ramírez, una de las organizadoras del taller Porque el ojo estorba, que se realizará el 20 y 21 de septiembre y el 4 y 11 de octubre en el ex convento del Carmen, impartido por las artistas visuales Diana Martín y Ana Cooke. “La desinformación ha originado que, de parte de la comunidad artística local y de los funcionarios, haya mucha discriminación. No saben cómo llegarle a este público”, asegura la periodista y promotora cultural, quien junto con Gloria Pérez ha trabajado estrategias de promoción y de intervención cultural con invidentes o débiles visuales a través de Cultura en Red, asociación que dirigen.

 

Con 30 mil casos, Jalisco es el tercer estado con mayor número de invidentes en el país. Y, sin embargo, no cuenta con estrategias de inclusión en actividades culturales para personas con discapacidad. “No existen diseños pedagógicos en el país para atender públicos invidentes o débiles visuales. Todos tienen derecho de acceder a los bienes y servicios culturales y a la recreación”, agrega Ramírez, quien comenzó con la labor de diseñar talleres a partir del reportaje radiofónico Ver no es mirar: de la oferta cultural para ciegos dentro de la miopía institucional, en que se denuncia la discriminación de que son víctima los invidentes en recintos culturales.

 

El nuevo taller que organizan Ramírez y Pérez —que ya antes habían realizado uno de fotografía, también para invidentes— estará dividido en tres sesiones: en la primera, titulada ¿De qué color es el viento?, se buscará lograr la empatía con los participantes. En la segunda sesión, nombrada Poesía palpable, se mostrará el valor de la línea a partir de trabajos realizados en repujado. En Pintura para acariciar los participantes en el taller aprenderán a utilizar la plastilina para delimitar espacios y formas. Las sesiones concluyen con Paisaje interno, sesión durante la que los participantes experimentarán con dripping —pintura goteada—, técnica que permite una referencia sonora al choque de la pintura con el papel ofreciendo una imagen mental.

 

Para Diana Martín, la experiencia de participar como una de las instructoras representa un reto. “Será una experiencia muy interesante, porque nos dará la oportunidad de ponernos en sus zapatos”, expresa la artista visual, quien descubrió que al vendarse los ojos para sensibilizarse las obras que trazó resultaron “más espontáneas, era más puro el proceso de creación”.

 

Santiago Baeza, director de Actividades Culturales de la Secretaría de Cultural, concluye que están en pláticas para implementar este tipo de programas regularmente en las actividades de la Secretaría de Cultura de Jalisco, porque, asegura, “abrir este tipo de talleres para personas con debilidad visual permite acercarnos a un público con el que tenemos poca relación”.

 

El taller tiene un cupo de 20 personas adultas con ceguera total o débiles visuales. No tiene costo y al término se hará una selección de las piezas que serán expuestas en la galería del Tren Ligero. Informes e inscripciones al 3658 9019 y 3030 1360.

 

A viva voz

 

Diana Martín

“Será una experiencia muy interesante, porque nos dará la oportunidad de ponernos en sus zapatos”

 

Jade Ramírez

“La desinformación ha originado que, de parte de la comunidad artística local y de los funcionarios, haya mucha discriminación. No saben cómo llegarle a este público”

             

            Guadalajara/Karla Bañuelos Sáenz