Recorrerá La Ruta del Conejo
Rojo diversos pueblos a lo largo del país
CECILIA DURÁN
El documental La Ruta del Conejo
Rojo, de Carlos Montaño, empieza a partir de hoy un largo recorrido por
numerosos pueblos de México, que tienen como denominador común la
migración, el abandono del campo y la falta de oportunidades para sus
habitantes. En cada lugar la película estará acompañada de una serie de
pinturas de Óscar Basulto.
La Ruta del Conejo Rojo es un proyecto multidisciplinario
que Montaño y Basulto comenzaron en 2006 con el
objetivo de recorrer el desierto mexicano. La idea original era que Basulto plasmaría sobre el lienzo lo que veía del
paisaje y de sus vivencias, y Montaño lo registraría con una cámara de
video. Sin embargo, el proyecto fue tomando otros rumbos a medida que
avanzaron en el trayecto.
Si bien para sus
trabajos se concentraron en su experiencia en el desierto, el cual
atravesaron en burro, no pudieron escapar a ser testigos de la realidad de
los pueblos a los que iban llegando. Las historias de los habitantes de los
pequeños pueblos, en las que se repiten problemas como la migración, la
pobreza, la falta de oportunidades, la escasez de los servicios básicos,
impactaron al pintor y los llevó al lienzo. Por su parte, Montaño se fue
concentrando en las historias de vida de la gente que fueron encontrando en
los 42 pueblos que recorrieron.
“Vamos a presentarlo
en un pueblo minero, en donde vivían 70 mil personas y ahora viven 2 mil.
Era un pueblo en donde se pasaban con los burros y la comunidad de Mineral
de Pozos, que fue la que nos invitó para presentarlo en su festival de Día
de Muertos. Son tres funciones, y también vamos a presentar todas las
pinturas. También lo vamos a presentar en la cabecera municipal que se
llama San Luis de la Paz, en donde viven más
personas. Ahí lo llevamos la semana que viene. De ahí nos regresamos a
Guadalajara, porque lo daremos a conocer el 11 de diciembre en el Cine Foro
y luego nos vamos a Moctezuma de Salinas, es la
primera zona en donde pasamos nosotros con los burros. Después vamos a los
pueblos por donde pasamos cuando hicimos el proyecto. Llevamos el proyector
y los reunimos para mostrárselos”, contó Basulto.
Añadió que La Ruta del Conejo
Rojo es un documental sobre lo que vivieron, “que es el abandono del
campo, la migración a las grandes ciudades, de meterse en el rol primermundista que es el que se les está vendiendo a la
gente, que vive en una sociedad marginadísima. Es la gente hablando de lo
que siente, de su abandono del campo mexicano, que no tiene apoyo. Este
documental es una visión muy realista. No es nada nuevo, pero sí es una
ventana a un pedacito de México, es una verdad que está ahí adentro, es lo
que sucede en los pueblos de este país. El sustento de México que es el
campo, está decreciendo, la gente no sale de ahí para mejorar, sino para
ser la gente pobre de las ciudades. Estados Unidos para ellos es el gran
pueblo.
El pintor adelantó que
el proyecto La Ruta
del Conejo Rojo finalizará con la publicación de un libro, “en donde
venga todas las pinturas y la fotobitácora de lo
que vivimos durante el viaje”. |