|   |   Los personajes de Macías Islas parecen haber sido arrancados de
        la realidad, sus rostros muestran la expresión indescriptible del que lo ha
        perdido todo. Al parecer no sufren demasiado; es más, carecen de propósito
        alguno. Sus acciones, si acaso realizan alguna, son mínimas y absurdas. Los
        demás sólo miran ausente al espectador. Y todo esto con unos cuantos trazos.
        
        
 La obra de Macías está articulada en un estilo que podría ser
        descrito como expresionista. En este sentido, sin duda celebra la estética
        expresionista exagerando los rasgos, languideciendo las miradas, creando, en
        suma, una atmósfera de callejón sin salida. Esa sensación de inseguridad y
        tensión que nos produce se da por el contraste sin matices de las áreas de
        luz y sombra.
 Maria Minera
        
         (fragmento)
        
        
 
 
         
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